Hace dos años presentó la Fundación Ferre Guardia el primer anuario de la laicidad. En aquel momento, teníamos el deseo de conocer el estado de nuestra sociedad en diferentes aspectos que, para nosotros, son capitales, como la educación, la libertad de conciencia, el espacio público, la adscripción religiosa, la relación entre política y religión, o la financiación de éstas. Aquel ejercicio nos ha servido, en este 3er anuario, para percibir cambios y tendencias, aunque de forma limitada, en nuestra sociedad y en cada uno de los temas que hemos considerado de interés.
Les invitamos a leer estas páginas con una mirada crítica. Será esta la mejor contribución que podamos hacer para que la laicidad, como principio, se acabe imponiendo al reduccionismo del dogma y al autoritarismo disfrazado de autoridad.