Estas páginas ya cuentan con un recorrido, con un caminar compartido que la Maquia ha sabido construir tejiendo nuevas complicidades. Han pasado cuatro años desde las primeras jornadas de Mujeres más allá de las armas, donde confluyeron voces y memorias de mujeres que desde distintas geografías y tiempos desafiaron la legalidad y un montón de roles de género que se asumían sobre ellas.[...] La memoria es siempre un campo de batalla, y en este, estamos luchando cuerpo a cuerpo por sentirnos hijes y nietes de una historia, por no perder unas memorias que sentimos nos pertenecen.