En este libro, Patricia Figuero emprende un desbordamiento que pretende limpiar como solo puede limpiarse lo que finge no estar sucio: ensuciando. Se atreve a pasar la lengua por su herida para buscar, con el habla convenientemente teñida de espanto y de voluntad de honrar a esa niña amarrada, la valentía que le es propia. La fisura entra por las manos es un sangrado, una curación, una garganta quemada por una voz que no se avergüenza de ser demasiado aguda, una explicación. Es desmontar la casa de la infancia y trazar un mapa de desconchones y culpar y amar a la vez; es una afirmación salvaje y una reclamación de lo salvaje como deuda: conocer dónde absorbimos nuestra herida no sirve para curarnos la herida, sino para nombrar por fin la herida y regodearnos en sus costras y arrastrarnos por el piso porque somos dueñas y podemos.
PATRICIA FIGUERO CORREA (Madrid,1975) Es Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense y titulada en Terapia Gestalt Aplicada a Adultos, por el Instituto Gestalt de Canarias. En la actualidad vive en la isla de La Palma, donde coordina diferentes espacios relacionados con la literatura.
Ha estrenado las piezas teatrales La isla existe y Que alguien llame a una de esas mujeres y su obra Eres un buen momento para morirme, homenaje al poeta palmero Félix Francisco Casanova. Fisura es su último trabajo como dramaturga, creado a partir de La fisura entra por las manos.