Kurdistán, el mayor pueblo sin Estado del mundo, con cerca de cuarenta millones de habitantes, disgregados entre Turquía, Siria, Irán e Irak, forma un impresionante laberinto de valles y montañas en el corazón de Oriente Medio. En las portadas de los periódicos y en los informativos televisivos, los kurdos suelen aparecer vinculados a desastres y trágicos acontecimientos: ejecuciones en Irán, bombardeos químicos bajo Sadam Husein, campañas de limpieza étnica del ejército turco, las bombas y decapitaciones de los yihadistas, el genocidio de los kurdos de religión yezidi, el secuestro de los cristianos, el angustioso asedio a Kobani, donde las milicias kurdas demostraron que el Estado Islámico no era invencible o los atentados en Turquía. Pero los kurdos llevan casi un siglo de luchas contra los regímenes que buscan su desaparición, desde las revueltas iniciales del cheik Said y conflictos posteriores hasta sus combates actuales contra el Estado Islámico. A través del repaso de su historia, cultura, religión, sociedad y costumbres, este libro aporta numerosas claves para comprender la realidad del pueblo kurdo y su papel central en la lucha contra el yihadismo y en la crisis de Oriente Medio.