El conjunto de ensayos contenidos en este libro representa un acontecimiento en los estudios sobre migrantes y en particular sobre el nexo establecido entre migración y expansión de la industria del sexo. Este marco analítico desafía abiertamente el discurso hegemónico, victimista y moralizante que sigue impregnando los documentos oficiales, las representaciones mediáticas, las investigaciones reconocidas y subvencionadas y las prácticas de política social sobre los 'problemas' de la 'prostitución' y de sus vínculos con la migración a los países del Primer Mundo.
Los ensayos de Laura Agustín invierten la mirada. Por una vez los contempladores pasan a ser contemplados y lo que se exorciza son los demonios de unos modos de pensar y de actuar obstinados en afrontar a los migrantes como víctimas, reducidos a una suerte de minoría de edad, juguete de los demás y de las circunstancias, espoleados ex-exclusivamente por la hambruna, sumidos en un infierno de explotación, engaño y violencia, obligados a enajenar ese núcleo duro del yo que es la sexualidad.
En el curso de su trabajo Laura Agustín no acepta entrar en el juego del 'intelectual universal' y prefiere moverse en las incertidumbres del 'intelectual específico', que se apoya en un saber concreto, obtenido sobre el terreno; no habla en nombre de la naturaleza o de la dignidad humanas; no se arroga la representación de nadie sino que trata de describir las situaciones tal como se dan, sin esquivar su complejidad y sus ambivalencias. Antes que proponer soluciones o profetizar prefiere dar la voz a los protagonistas sin hacer de ventrílocuo.