La inmigración es uno de los temas cardinales de la realidad española. Hasta ahora, su estudio era un privilegio de nuestro punto de vista como país. Este libro marca una ruptura, dándole voz a la experiencia del propio inmigrante. Escrito con pasión polémica, El cálculo egoísta combina una inusual sincronía entre la política, la sociología, la historia, la economía, la psicología y el análisis jurídico.
Asuntos como el «trabajador huésped», el «efecto llamada», el «contrato de integración» y el «síndrome de Ulises», son examinados rigurosamente. Al indagar si somos una sociedad racista, el autor plantea una redefinición del racismo en la inquietante actualidad europea. Valiéndose de un lenguaje certero y de conceptos como «sociedades-desalentadoras» y «sociedades-puerto», Sequén-Mónchez rebate las posiciones de Samuel Huntington y George Borjas, refutando que los inmigrantes deseen únicamente mejores salarios y la defraudación del Estado de Bienestar. Por el contrario, otorga a su salida un carácter político. Es la decisión individual entre la violencia de sus entornos y la experiencia de la libertad.