En este libro Bloch analiza por qué ha fracasado la idea de utopía, lo hace analizando el pensamiento de Schopenhauer, Nietzsche, Hegel, Marx o Kant, entre otros, e investiga en detalle lo que entendemos como futuro, o no futuro, revolución o sueños, todos ellos conceptos que en su acercamiento utópico han creado en la sociedad una permanente sensación de fatalismo y fracaso. Con su fineza intelectual Bloch nos expone su motivo de esperanza y nos contagia su optimismo en que la utopía, en última instancia, sigue siendo necesaria para superar esa sensación.
0201C;Despedida de la utopía0201D;, entre signos de interrogación, por supuesto. Resulta una cuestión interesante, una cuestión que incluso posee en su interior varias líneas de interés, en tanto que la utopía contiene y presupone conceptos y aspectos diversos. En el sentido más elemental, también en el primero de todos, la utopía es malentendida por completo o no se la reconoce. Se cree que la utopía es una bobada sin contenido, algo que de todos modos no sucederá, que reside en el futuro 02013;en un tipo de mal futuro, impredecible, tal vez bueno en lo que a contenido se refiere02013; pero que, en todo caso, resulta inalcanzable y está totalmente fuera de discusión para un hombre en su sano juicio. Así, el pequeño comerciante no utiliza la palabra 0201C;utópico0201D; ni 0201C;utopía0201D;, no necesita tanta educación, y dice: 0201C;¡Va, eso no es nada, amigo, no es más que una utopía!0201D;, y si esto se dice con acento berlinés, mejor que mejor. La palabra utopía es entendida aquí como una vulgar construcción de castillos en el aire. Este es su sentido primario, del que no necesitaremos ocuparnos de aquí en adelante.