Monografía resultado de un trabajo de investigación realizado entre los años 2009 y 2012 en el marco del Inventari del Patrimoni Etnològic de Catalunya (IPEC) que lleva a cabo el Departament de Cultura de la Generalitat de Catalunya. Ochocientas casitas unifamiliares y de planta baja a orillas del río Besòs, todas de colores diferentes, comprimidas entra una zona industrial semiabandonada y la nueva Barcelona del AVE y del Fòrum 2004. En este lugar de margen, desconocido y estigmatizado, grupos de migrantes y autóctonos lucharon juntos para crear un paisaje humano excepcionalmente denso y rebelde: un barrio anticlerical y anarcosindicalista, en el que la resistencia duró ochenta años, donde buscaron cobijo Buenaventura Durruti, Quico Sabater y un sinfín de excluídos e indeseados de los lugares y todas las épocas.