Para afianzar la guerra en el mercado, ésta fue convertida en algo permanente, total, preventivo; con un enemigo interno y difuso que pudiera ser cualquiera y estar en todas partes. Bajo la concepción y estrategia norteamericana, este sistema ha adquirido una dimensión violenta con la que se definen a conveniencia las amenazas y se construye cada tanto la concepción mundial de enemigo. No obstante, lo que impulsa a la economía estadounidense es, al mismo tiempo, lo que la hunde: la intervención en supuestas transiciones a la democracia y el apoyo a la industria bélica tienen por respaldo un déficit económico que aumenta a medida que se promueven acciones expansionistas.Bajo este contexto, María José Rodríguez Rejas conceptualiza con el título de este libro el ciclo neoconservador presente en este momento histórico. Revalorar a América Latina en tanto reserva de recursos estratégicos es uno de sus objetivos, y México, como el país con el mayor número de acuerdos económicos y de seguridad con Estados Unidos (junto con los peores resultados económicos y sociales), ocupa un sitio importante en su análisis: es a través de fuentes primarias y el análisis institucional que expone el saqueo y las formas de violencia propias de una situación de guerra, dos de los elementos que dan base a una cultura que naturaliza la violación de la autonomía y reproduce códigos simbólicos en las prácticas cotidianas.