En ningún otro lugar de Venecia existen espacios tan amplios
como en la Giudecca. La isla vista desde el Sur revela a los curiosos
rebosantes zonas de verde. Hay un jardín en particular
que llama la atención por la intensa vegetación salvaje que parece
haber tomado la delantera sobre verjas, tejados y pérgolas:
es el jardín que todos conocen por el nombre de su creador:
Eden.
Publicado por primera vez en 1903 en el Country Life, Un jardín
en Venecia es el relato de la creación de un jardín desde la
adquisición de la propiedad hasta la realización del arduo proyecto
que Eden llevó a cabo con una flema típicamente inglesa
y una tenacidad que hizo de su jardín el más grande de Venecia.
Su obra botánica suscitó el interés de Proust, Cocteau, Thomas
Hardy y Henry James que probablemente se inspiró en él para
escribir Los papeles de Aspern.
De Frederic Eden (1828-1916) hay pocas noticias
biográficas. Aristócrata, marido de Caroline
Jekyll, hermana mayor de la conocida escritora
y creadora de jardines Gertrude, se instaló
en Venecia buscando un clima mejor y compró
la propiedad a principios de los años ochenta
del siglo xix.