«En el verano de 1963 yo me enamoré y mi padre se ahogó». Así arranca esta extraordinaria novela sobre el paso de un adolescente por los oscuros recovecos de la pasión adulta. «Agua salada» es una revisión contemporánea de la novela corta de Turguénev «Primer amor», pero ambientada en un paisaje estival de agua, cielo y arena bellísimos. En ella, con momentos tan poderosos como los de cierto Nabokov o el Salinger más celebrado, se relata de manera apasionante los trascendentales «sucesos amorosos» que cambiaron a una familia para siempre.
En una remota isla de la costa atlántica, en un lugar idílico que siempre ha sido fundamental en las vidas de todos ellos, el quinceañero Michael y sus padres inician sus habituales y apacibles vacaciones… Hasta que la aparición del amor y las pasiones, tanto las juveniles como adultas, quiebra esa calma intocada hasta entonces.
Hay en estas páginas distintas formas de amor: el sensual, el paternal o filial, el romántico… Magistralmente, Charles Simmons explora el corazón mismo de la necesidad de sentirnos deseados, la complejidad de los vínculos padres-hijos y la adolescencia de un chico con todos sus anhelos, confusiones y desengaños. Y lo hace con una prosa tan luminosa como los paisajes de esta fascinante novela.