Arrancan los años veinte y el encantador Lanny Budd, heredero del emporio armamentístico Budd Gunmakers Corporation, lleva una relajada vida en la Côte d’Azur. La Gran Guerra ha terminado y en los clubes de jazz los burgueses vacían botellas de champán festejando que aún siguen vivos. En los Estados Unidos, las finanzas se disparan y los nuevos ricos llegan a Europa para comprar a precio de ganga el glamur del que carecen.
También asoman, sin embargo, nubes oscuras en el horizonte: las camisas negras de Mussolini marchan desafiantes hacia Roma y un histérico hombrecillo de bigote recortado escribe desde la cárcel que Alemania ha de recuperar su lugar en el mundo. Irremediablemente, la fiesta toca a su fin cuando el crac de 1929 sacude el mundo desde sus cimientos, recordándonos que todo exceso tiene su consecuencia.
En esta segunda entrega de la saga de Lanny Budd, nuestro joven playboy nos brinda la crónica de un tiempo convulso, con todos los ingredientes, históricos y folletinescos, para dejar al lector rendido a los pies de su irrepetible protagonista.