Durante su paseo matutino, Cerdito se topa con el granjero, el tendero, el caballero, el alcalde y el rey. Todos le preguntan adónde va, pero Cerdito les dice que no va a ningún lado, sino que vuelve… Vuelve precisamente de salvar lo que más le importa a cada uno de ellos. Todo eso, dice Cerdito, aconteció la noche anterior.
¿Será posible? ¿Cómo pudo Cerdito estar en tantos lugares al mismo tiempo? ¿Será esta la historia de un Cerdito mentiroso?
Al lector le tocará leer la historia a partir de distintos puntos de vista y decidir por su cuenta, mientras Cerdito se toma una riquísima siesta.
Una historia luminosa y muy simpática, contada con el brío típico de la prosa de Juan Arjona y de las ilustraciones de Ximo Abadía.