Cultura_RAM quiere decir que la cultura mira ahora menos hacia el pasado (para asegurar su recuperabilidad, su transmisión) y más en cambio hacia el presente y la producción incondicionada del futuro.
El uso en este libro de la metáfora de los modos de la memoria propios del ordenador es probablemente algo más que una metáfora: en buena medida, la modificación histórica de los modos de gestión de lo cultural por parte de las nuevas y eficaces herramientas tecnológicas es seguramente el verdadero factor desencadenante del cambio en el propio sentido de la cultura que intenta indicar con la expresión «cultura_RAM».
Tomada como una simple metáfora, intenta ilustrar que el tipo de memoria que produce la cultura no es tanto una de archivo (y "back-up", una "memoria de disco duro" para entendernos, ROM en la jerga informática), sino más bien, y sobre todo, una "memoria de proceso", RAM, de interrelación activa y productiva de los datos (y de interconexión también de las máquinas entre las que ellos se encuentran distribuidos, en "red"); una memoria de programa y procesamiento y no más una de archivo; una memoria red y no más una memoria documento; una memoria constelación, fábrica, y no más una memoria consigna, almacén.
Este tipo de memoria ya no enfoca singularidades señeras, ya no se define mediante monumentos definitivos, en lugares o escenarios privilegiados. Por el contrario, se dispersa y clona en todas direcciones, se reproduce y distribuye como un virus a toda su red de lugares, difundida como onda y eco, deslocalizada en una multiplicidad de «no lugares», hacia los que fluye (y desde los que refluye) activamente en tiempo real.