La amistad entre Walter Benjamin y Bertolt Brecht está entre las más trascendentes del siglo pasado en lo estético y lo político. Es una amistad que sigue irradiando una atracción mágica. Hannah Arendt la consideró 'única porque en ella el mayor poeta alemán vivo se encontró con el crítico más importante de la época'. Para Benjamin era una 'constelación' significativa, una de las relaciones que tenían mayor relevancia en su vida. Pero muchos de sus amigos, como Theodor Adorno o Gershom Scholem, no compartían ese juicio. Su recelo llevó a falsas interpretaciones que aún subsisten en la investigación y que han condicionado, incluso, los criterios de edición de la obra de Benjamin. Este libro recoge las huellas del encuentro eliminando al mismo tiempo los prejuicios. Y lo hace a partir de numerosos documentos inéditos que posibilitan nuevas evaluaciones. Por primera vez se analizan las actas de las conversaciones sobre la revista que habían planeado, Krise und Kritik (1930-1931), y se describe la proximidad personal puesta a prueba en el exilio. Sobre la base de las cartas, apuntes de los diarios y notas, se trabajan los temas de la colaboración entre ambos intelectuales (la literatura policial, el pensamiento como intervención, la escritura en el exilio, Trotsky y Stalin, Kafka, Baudelaire). Algunos capítulos están dedicados tanto a los trabajos de Benjamin sobre Brecht como a las manifestaciones de Brecht sobre Benjamin, por ejemplo los epitafios.